Los zapatos

Los zapatos son una declaración de intenciones y el mejor complemento a la hora de vestir. Tanto es así que en la mayoría de ocasiones, me despierto pensando que ropa ponerme para los zapatos que me apetece llevar ese día. 

Reconozco que los zapatos me vuelven loca, tengo un armario completo lleno de ellos, cada uno en su caja original, con una etiqueta con la descripción para encontrarlos rápidamente, he perdido la cuenta, pero os confieso que hasta hace poco los contaba de vez en cuando como si de un tesoro se tratara. A algunos los tengo desde hace años y aún no los he estrenado... están ahí esperando la ocasión para hacerlo.

La feminidad empieza por los pies y hay que invertir en ellos. Unos buenos zapatos nos cuidan los pies y nos hacen sentir más guapas y seguras. Invertir en calzado es invertir en lujo. Cuantas veces he visto a mujeres con zapatos extremadamente usados y desgastados, pero con un bolso de marca colgando del hombro... ¡¡Error, error y horror!!  Si llevamos un bolso de marca, el calzado, como poco debe de estar a la altura o sobresalir por encima de ese bolso. 

De verdad, os aconsejo que no descuidéis vuestro calzado, por mucho que os puedan gustar unos zapatos, por muy cómodos que os resulten, en el momento que veáis que empiezan a deformarse, no os los pongáis, los zapatos dicen mucho de nosotros. Hay un estudio basado en la gran variedad de estilos, marcas y funciones que existen del calzado. Según el estudio, nuestro calzado contiene información sobre nosotros, manda señales no verbales y al parecer una persona que no nos conozca de nada pues definir nuestra personalidad al 90% sólo contemplando nuestros zapatos. Además han sacado conclusiones como estas: Que los zapatos más costosos pertenecen a quienes ganan salarios más altos. Que los zapatos que brillan, son de aquellas personas muy prolijas y los llamativos a aquellos que adoran ser el centro de atención... Y más sorprendente aún: Que las personalidades agresivas se inclinan por utilizar botines; las personas agradables prefieren el calzado cómodo y funcional; y quienes se caracterizan por su tranquilidad, se destacan por llevar zapatos ultra chic y bonitos… ¡Pero incómodos! 

En los hombres el calzado es principal.. Personalmente me gustan los clásicos, los que tienen una estética sencilla y de líneas básicas, no me gustan los hombres con zapatos excesivamente originales o muy llamativos, me hacen sentir inquieta. Aunque algunos ideólogos apuestan por looks con cierto desarreglo y con sensación de comodidad ya que de esta manera denotan cierto estatus social, yo sigo inclinándome por los hombres bien arreglados y con los zapatos impecables.

Sugar Free Col. ©